Los Sorianos, que presumen de austeros, aspiran a rescatar la bandera de los 60 millones de pesetas |
Cuatro años y medio después del izado de la gigantesca bandera de Gran Canaria por parte del entonces presidente del Cabildo Insular de Gran Canaria, José Manuel Soria, en la plaza de la Fuente Luminosa, los candidatos del PP a la corporación insular, con José Miguel Bravo de Laguna a la cabeza, presentaron ayer su plancha junto al mástil vacío en un acto de reivindicación del macropaño de 294 metros cuadrados y 360.000 euros de coste (sin mantenimiento).
En un acto nostálgico, los populares se plantaron junto al mástil para la presentación de los candidatos con los que aspiran a reconquistar la Presidencia del Cabildo Insular el próximo 22 de mayo.
La bandera, de las mismas dimensiones que la que izó el Gobierno del PP en la Plaza de Colón de Madrid -294 metros cuadrados de tela sobre un mástil de cincuenta metros- en la época de Federico Trillo, fue un capricho de Soria y un ejemplo de la política de derroche del protagonista de nuestra historia. El mismo que hoy presume de austero y de “abanderar” la contención del gasto público.
Sorprende, por tanto, que sus correligionarios, que deberían asumir sus dictados sin salirse del guión, hayan utilizado como escenario para su primera foto oficial un mástil que acogió a una bandera que terminó costando más de 400.000 euros. ¿Un error de estrategia en tiempos de crisis o una imposición del protagonista de Los Sorianos?
Recuerden que el despilfarro de la bandera no consistió únicamente en el abono de 60 millones de pesetas sino también en una factura adicional de 18.000 euros (tres millones de pesetas) anuales en concepto de mantenimiento. Una labor que, incluso, suponía un “peligro”. Recordemos qué decía el informe de la empresa encargada del mantenimiento, Alisios Sailing Center:
'El cable eléctrico que está entre las dos palmeras justo al norte del mástil hace muy difícil el izado y arriado de la bandera cuando el viento sopla del sur y esto es un peligro tanto para nuestros operarios como para los viandantes'.
Recapitulemos también que el fabricante de la bandera recomendaba que el viento máximo que podía soportar el paño era de 42 kilómetros por hora. Esto hacía poco aconsejable colocar la bandera en la Fuente Luminosa a una gran altura. El propio informe de Alisios Sailing Center señalaba que «en nuestra ciudad, son mayoría los días en que el viento sopla entre 25 y 30 kilómetros en superficie, lo que supone cerca de 40 kilómetros por hora a la altura de la bandera y aún más en las rachas».
Pese al coste y a los informes sobre los “peligros”, Soria emuló a Trillo e izó la bandera el 30 de septiembre de 2006. La bandera se desplomó varios días después de que fuera izada y, medio año más tarde, el Cabildo la retiró por fallos en el mecanismo de izado y arriado.
Los gastos que produjo el majestuoso mástil y la distinguida bandera, no son importantes si se tiene en cuenta el bienestar que experimentaban los ciudadanos cada vez que pasaban por la plaza de la Fuente Luminosa. Así, ese presidente austero y ahorrador hizo durante un tiempo felices a todos los habitantes de Las Palmas de Gran Canaria, quienes encontraban todos sus problemas reconfortados a su paso por la Fuente Luminosa.
Hoy, nuestro protagonista, retorna a la escena del delito, aunque ahora simula no ser el mismo que antes. En aquel entonces, derrochaba y hoy es austero. ¿Cabe en su proyecto la bandera?
Hay que ser paletos...
ResponderEliminarNo sé so paletos, pero si el primer mensaje que lanzan a los ciudadanos es que quieren rescatar una bandera que Dios nos coja confesados
ResponderEliminaralguno que no tenga próxima cita en los tribunales?
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